Comienzo con mullos fallos por parte y parte. Los dos equipos dibujanron sobre el parquet malagueño un juego sin acierto y con errores por doquier. El dato es elocuente: minuto 4, marcador de 0-3. En seis minutos no había anotado el conjunto local, muy precipitado, mientras el Obradoiro ganaba en ese primer octavo por 0-7, con cinco puntos de Bulfoni. La primera canasta local fue un triple de Zamora (3-8) para romper la dinámica de fallos en ataque, venezolano firmó dos triples para dar entusiasmo a su juego (6-10). Ese primer acto dejaba entrever que iba a ser un partido de tanteo bajo, en los 70 podía estar la victoria. Pero el Clínicas Rincón, a base de triples, estrechaba el marcador 11-12 tras otro lanzamiento de 6.75 del infante Abrines, 18 años, y con un gran futuro. El equipo “boquerón” consumaba la remontada con una penetración de Cobos para dejar el tanteador 13-12 al término del primer cuarto, tras un parcial de 13-5.
El equipo malagueño ya estaba en el partido, el Obradoiro confirmaba la mejor versión del filial del Unicaja y le costaba parar los lanzamientos triples de los malagueños que cogían el mando del marcador 18-15 en el inicio del segundo cuarto. La efectividad en los lanzamientos triples empezaba a marcar el transcurso del choque, cuando el Clínicas Rincón llevaba 26 puntos, 18 eran de triples (26-20). Moncho López, que ya había advertido del juego camaleónico del filial cajista, se desesperaba viendo como su equipo no estaba entonado y cometía fallos muy claros en ataque y no cerraba el tiro exterior del Clínicas. La máxima ventaja local se producía tras una canasta de Martínez (30-22), la respuesta para el mejor hombre del primer tiempo Javier Bulfoni con un triple. La aparición de Yunyent en los dos últimos minutos hizo que el partido se estrechase y todo quedara pendiente para el segundo tiempo
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