CRÓNICA PARA LOS COMPAÑEROS DE LEÓN:
El Baloncesto León perdió un partido que llegó a controlar durante parte del choque, con diferencias cómodas, incluso de 15 puntos. Pero el conjunto malagueño se puso por delante a falta de cinco minutos y estuvo certero en los momentos finales.
El partido comenzó con la sorpresa en el quinteto inicial del Clínicas Rincón, dejando a sus jugadores “estrellas” y con minutos en ACB, en Unicaja, Sinanovic y Freire fuera del equipo titular. Después de una mínima ventaja local, el León comenzó a correr y en menos de un minuto conseguía siete puntos, que le daba su primera ventaja 5-10 a los cuatro minutos, con un buen Jorge García y Kahiem Seawright. Enfrente, el acierto de Pablo Almazán, otro joven canterano, que lideraba el ataque del Clínicas. Pero el León estaba generoso en ataque y de nuevo se vio como en apenas segundos, el equipo castellano lograba ocho puntos en un abrir y cerrar de ojo. Fue curioso ver los 5 puntos seguidos de Jorge Calvo, anotando un triple y al segundo robar la pelota en línea de fondo para anotar dos puntos más. El Clínicas comenzaba a mover el banquillo, con cinco jugadores nuevos, dispuestos a parar la sangría en ataque que estaba firmando un acertado León, 30 con puntos en el primer acto. Un atinadísimo Jorge García lograba su tercer triple y finalizaba el primer cuarto con 13 puntos, secundado por Quezada, Calvo y Seawright con 5, haciendo así olvidar las bajas de Bernabé y Rochia. El primer gran handicap para los malagueños, las tres faltas personales de su “gigantón” Sinanovic a los nueve minutos.
Era curioso ver el quinteto del segundo cuarto del Clínicas, un brasileño, un venezolano o un senegalés criados en la cantera del Unicaja. Como era de esperar, el ritmo anotador del León se frenó en el segundo cuarto, no era normal lo de los primeros diez minutos. Pero seguía liderando el partido y marcando el juego que más le convenía, ante un rival que empezó a fallar bastante sus tiros de media distancia. De nuevo, los triples, uno de Carlos Fernández y Javi Múgica, extraordinario en su entrada, le iban a dar la máxima ventaja hasta entonces en el minuto 15 (26-38). Ventaja que llegó a irse a 15 puntos (29-44). Paco Alonso, buscaba su primer triunfo como nuevo inquilino del banquillo malagueño, no daba con el equipo idóneo para parar a un León muy concentrado en todo momento, dispuesto a olvidar lo de Palencia. El Clínicas, siempre muy combativo, llegó a reducir hasta siete puntos esa desventaja, con un parcial de 11-3, con tres triples del puertorriqueño Piwi García (40-47). Era el aviso claro de que el joven equipo malagueño quería volver a ganar al León, que había perdido en sus visitas a la Axarquía, aunque en otro pabellón. La buena noticia para el Clínicas era perder sólo de siete cuando tu rival firmaba 7 de 10 en triple. Otro dato a tener en cuenta al descanso con estadísticas en mano, las 6 falta del León por las 13 del Clínicas Rincón. Y es que el León anotó seis canastas de dos, siete de tres y 16 de 17 tiros libres en el primer cuarto.
El León volvía a irse por encima de la decena de puntos, tras, como no, más triples, ahora dos de Calvo (44-57). Paco Alonso llamaba a pista a Sinanovic, pero pronto cometía la cuarta, al igual que Nguirane, y el plan de jugar por dentro, se le volvía a pifiar. Apareció entonces, el juego exterior de Almazán, con cinco puntos consecutivos y los triples de Cobos y Zamora para resistirse a perder (55-61), un 8-0 para mandarle un recado al León que ya no estaba tan cómodo atacando. Que unido a otro arreón de 8-4, ponía el partido 63-65 en un santiamén, con tres triples de Pozas, un canterano de 18 años. Ya no estaba tan cómodo el León, que había perdido su cómoda ventaja de cara a los últimos diez minutos.
Un triple de Manny Quezada parecía dar cierto respiro (65-72). Pero siete puntos consecutivos de los malagueños le hacían empatar a 72 en el minuto 37, tras una canasta de Rafa Freire. Con 73-73 se llegaba al último octavo. Y empezaron los nervios, las precipitaciones, los fallos por cada bando. Sólo Quezada, 5 puntos, había anotado en los primeros 7 minutos del último cuarto. Pero 5 puntos consecutivos de Iván Martínez confirmaba la reacción 78-75, quedaban dos minutos y medio. Quezada y Calvo fallaban de tres, ahora no entran. Piwi García, palmea un rebote casi imposible 80-75, a falta de un minuto. García colocaba el 80-77. Fallo de Martínez, y el 80-79 lo pone Seawright, en otro rebote ofensivo. El propio jugador de “color” forzó la personal a Sinanovic a falta de 20 segundos, anotando sólo un tiro (81-79). A falta de 11 segundos empata Seawright. Este jugador cometería una personal con el tiempo cumplido sobre Martínez, que no desaprovecha para dejar con la miel en los labios al León.
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